*Durante la Conferencia-Seminario:“El individualismo en los tiempos hipermodernos”.
Llama al magisterio a elevar las conciencias del estudiantado, para combatir la cultura del “hiperconsumo”.*
Cancún, Q. Roo, México, 27 junio 2019.- El filósofo y sociólogo francés, Gilles Lipovetsky, propuso en la Universidad del Caribe un cambio en el sistema educativo para elevar la conciencia de las personas, como el único antídoto a la cultura del “hiperconsumo”, la cual se traduce en un mayor bienestar material que, paradójicamente, no va de la mano con la felicidad.
El profesor de la Universidad de Grenoble, Francia, ofreció en la Universidad del Caribe la Conferencia-Seminario “El individualismo en los tiempos hipermodernos”, donde propuso el término de la “sociedad del hiperconsumo”, definida por tres características:
1) Hiper.- querer siempre más, desear más y tener más de lo que se necesita para vivir, en una lógica vinculada con una oferta de consumo estratosférica, sólo posible gracias al internet: Spotify, Netflix, ciber compras, lo que genera que hasta el 70% del PIB de países desarrollados, como Estados Unidos, descanse en el consumo.
2) Individualización.- Un modelo a la carta con un sinfín de opciones que favorece la individualización del consumo sin límites culturales, al grado de relajar las limitaciones de las clases sociales; de tal manera que hoy hay pobres con cultura del consumo.
3) Consumo emocional.- No se compra para demostrar poder económico, sino por entretenimiento y placer. Se pasó del consumo ostentoso clásico, al consumo emocional y de experiencias.
Al cuestionarse hacia dónde va la sociedad del “hiperconsumo”, destacó que aun cuando se consume tres veces más energía que en los años 60 o el PIB de Europa se duplicó desde los años 70, las personas no son más felices, lo que se comprueba con estadísticas al alza de depresión, ansiedad y patologías psicosociales.
Educación=solución
Ante esta compleja problemática, Gilles Lipovetsky, propuso buscar una relación equilibrada con la cultura del consumo: no satanizarla, pero tampoco idealizarla, comenzando porque está provocando un desastre ecológico.
El desafío, dijo, es que el bienestar que da el consumo, no se vuelva la totalidad de la existencia, lo cual sucede porque la gente que se avoca al consumo es porque no tiene nada más en su vida que la llene.
Por tanto, señaló que el papel de las instituciones educativas y los docentes es fundamental para abrir la conciencia de niñas y niños, para que aprendan a llenar el vacío de la existencia, con una educación que abra las posibilidades de la vida y no las estreche a lo que ofrece el mercado.
“Debemos ponerle límites a la pasión consumista y una pasión sólo se puede echar atrás con otra pasión, ya que la razón es muy débil para combatirla… Como maestros debemos cargar con la responsabilidad. ¿Qué pasaría si la gente tuviera otros intereses además de comprar? No es una existencia indigna, pero sí muy pobre”, afirmó.
Propuso que las y los docentes enseñen que hay mucho más en la vida que sólo comprar; capacitar las conciencias en relaciones humanas, en solidaridad, para salir del individualismo y obtener cambios sociales; ya que al elevar el nivel de la conciencia, se generan sociedades más exigentes y por tanto, tendremos una oferta más inteligente.
Tras la conferencia, se realizó un amplio conversatorio con las y los asistentes, luego del cual, la Rectora de la Universidad del Caribe, Dra. Ana Pricila Sosa Ferreria, ofreció un reconocimiento a Gilles Lipovetsky, a quien el secretario académico de la institución, Dr. Pedro Moncada Jiménez, destacó como el reconocido autor de numerosas obras como “La era del vacío: ensayo sobre el individualismo contemporáneo”, “El imperio de lo efímero: La moda y su destino en las sociedades modernas”, “El crepúsculo del deber: La ética indolora de los nuevos tiempos democráticos” y “La tercera mujer: Permanencia y revolución de lo femenino”, entre otras.